A nivel global, la calma post reunión presidencial del G20 duró poco. Los temores acerca de la guerra comercial, sumado a una desaceleración económica que se está observando en distintas partes del planeta, terminó generando una toma de ganancias en los activos de riesgo durante principio de diciembre (que se encuentran en una tendencia horizontal pero volátil desde hace un par de meses).
Nuevamente, pareciera que es la Reserva Federal quien puede poner paños fríos a la situación. Varios funcionarios de dicha entidad están comentando que la tasa de referencia se encuentra cerca de un nivel “neutral”, y si dieran a entender que las subas de tasa para el año que viene serían menores a las proyectadas hasta ahora, podrían llevar algo de calma a inversores que se ven atrapados entre un menor crecimiento y una Fed que hasta ahora parecía intransigente.
Por lo pronto, la curva de bonos del Tesoro de EUA ajustó en pocos días sus tasas de largo plazo (-30 bp la tasa a 10 años) pasando a descontar un recesión en los próximos meses.
Por el momento consideramos que el mundo se desacelera pero no entra en recesión (habrá que monitorear principalmente la guerra comercial global, el menor crecimiento chino,y la política restrictiva de la Fed vis a vis el alto endeudamiento global). En el mercado de acciones, el S&P devolvió en los últimos dos meses toda la ganancia anual, por lo que estaría cotizando actualmente a 15x ganancias 2019 (estimadas por el consenso), levemente por debajo de su promedio de los últimos cinco años.
En la Argentina, las acciones han tenido en los últimos meses un comportamiento relativo mejor al de los bonos soberanos. Las tasas de los títulos públicos en dólares se acercan a los máximos observados meses atrás, rindiendo nuevamente más que la deuda croata (país en guerra con Rusia).
Las causas de corrupción continúan avanzando con indagatorias a cada vez más empresarios y funcionarios del gobierno anterior. El gobierno actual ha dejado en claro que su intención es que las compañías investigadas sobrevivan, y que sean los dueños de las empresas quienes den un paso al costado y respondan ante los jueces.
El BCRA pudo bajar levemente la tasa de referencia (a niveles del 60% anual) mientras mantiene su plan de crecimiento nulo de la base monetaria. La menor disponibilidad de pesos en la calle, sumado a la estabilidad del dólar y la recesión, permitiría observar un sendero decreciente en la inflación (esperamos entre25% y 30% para 2019). La contracara obviamente sigue siendo la recesión económica, en donde estimamos estar atravesando actualmente los peores meses (esperamos una caída de 1,8% en el PBI de 2019, por el elevado arrastre estadístico del 2018).
A pesar del actual panorama económico, la imagen positiva del presidente Macri (30%), se mantiene en niveles similares a la de la principal figura de la oposición (la expresidente Fernandez de Kirchner). Mientras tanto, en el peronismo sigue sin verse alguna figura que logre aglutinar a dicho partido político.
En renta fija argentina seguimos recomendando exposición a la curva soberana en dólares con una duration muy acotada. La diferencia de tasa entre un bono que vence en 2020 y otro que vence en 2019 es de aproximadamente 6 puntos porcentuales, por lo que incluso en el tramo corto existe un elevado potencial de ganancia en caso de descomprimirse la incertidumbre política. Para plazos más largos preferimos deuda corporativa(las empresas tienen en general un perfil de vencimientos mucho más despejado que el soberano, además de tener un bajo apalancamiento).
En renta variable, las empresas del grupo Techint se han visto afectadas por la indagatoria de su principal accionista, Rocca, en relación a los casos de corrupción conocidos como “de los cuadernos”. De esta manera, Ternium Argentina cotiza a menos de 3x las ganancias estimadas para 2019. Preferimos en servicios públicos: TGS, TGN, Transener y Pampa; en bancos: Macro (el accionista Brito, que renunció a la conducción del banco, fue procesado recientemente en el caso Ciccone) y Supervielle; en media a Cablevisión Holding; en alimentos a San Miguel; en materiales a Ternium Argentina y su controlante Ternium.
Durante 2018, la bolsa argentina tuvo la peor performance de la región (-54% en dólares), luego de liderar la suba durante 2017. El índice Merval Argentina se encuentra actualmente al mismo valor en dólares de principios de 2015.
Argentina está cotizando según nuestras estimaciones a 9x ganancias 2019 en dólares (7,8x ganancias proyectadas en pesos), un descuento de aproximadamente 40% respecto a otros mercados de la región.
Para 2019, obtenemos un potencial de suba de 49% en dólares para el índice Merval Argentina (+98% en pesos). Al ser un año con elecciones presidenciales, la política será nuevamente la que defina el devenir de los activos financieros.